Mis primeros cómics

Mamut es una muy interesante colección de cómics para los más pequeños. Está dividida en tres categorías diferentes según las edades (a partir de tres, de seis, y de nueve años), lo cual hace que sea aún más atractiva, si cabe. Bang Ediciones tiene la culpa de esta fantástica idea, una editorial catalana relativamente joven (nace en 2004) que, gracias a su calidad y especialización en cómic de autor, ha sabido hacerse un importante hueco en el mercado. 

No es escaso el público que actualmente busca iniciar a sus hijos/sobrinos/primos/nietos en el mundo del cómic. Y ya era hora, porque parece mentira que con la larga trayectoria del noveno arte, algunos aún se empeñen en decir “no me gusta el cómic”, lo que equivale, más o menos, a decir que no te gustan los libros con esquinas.

En cualquier caso, es innegable el carácter conductor y potenciador de la lectura que el cómic posee entre los más jóvenes. Para los niños que devoran libros y para los que no, estos relatos serán casi siempre muy atractivos, especialmente para estos últimos, para los que la lectura se convierte casi en una obligación académica. Se asombrarán disfrutando con un texto que, acompañado de viñetas, hará atractivo algo que de otra forma se negarían a disfrutar. Es sencillo “engañar” al gusto con un cómic, no sólo para que después derive en otras lecturas con forma de novela o ensayo, sino para que entiendan que se trata de una disciplina más, tan importante como el resto de artes entre las que tendrán la libertad de elegir según vayan creciendo.

Además, los más pequeños, esos que aún están aprendiendo las letras y necesitan de ti para escuchar cualquier historia, se sentirán (a su modo) autosuficientes al avanzar en el complejo mundo de la comprensión lectora, aun cuando el libro que tengan delante sea uno de esos sin palabras. 

Para ellos, ti- jack, de Estelle Billon, es la lectura perfecta. Las viñetas de un divertido gato-náufrago que llega a una supuesta isla desierta en la que, sólo con imágenes, conseguirá divertir a los más pequeños… y a los que no lo son tanto. Es, como el resto de títulos de la colección Mamut, una narración visual moderna que entiende bien el universo infantil y sus necesidades, por lo que congeniará con los niños, incitándoles y animándoles a leer y disfrutar con cada historia.